Una carita en proceso

Después de varios meses sin poder coger un pincel literalmente, he podido ponerme a pintar y volver a disfrutar de este magnífico hobby. La cara es la del busto del templario de Young Miniatures y aún no está acabada, a falta de corregir cosillas como la brusquedad de los golpes de luz en el puente de la nariz, añadirle alguna mancha o corte que rompa la imagen de cutis perfecto de un caballero en Outremer...

En definitiva, espero vuestros comentarios.